Las experiencias tempranas influyen de manera decisiva en el desarrollo de la personalidad, lo que hace a niños y niñas especialmente sensibles a lo que ocurre en su entorno.
La detención precoz y una intervención temprana tienen una gran importancia en esta etapa de la vida, para evitar que se fijen los síntomas y corregir malos hábitos, que posteriormente son más difíciles de erradicar.
Campos de Intervención:
Esta web utiliza cookies para obtener datos estadísticos de la navegación de sus usuarios. Si continúas navegando consideramos que aceptas su uso. Más información Aceptar